domingo, 17 de agosto de 2014

Inteligencia Musical





La inteligencia musical corresponde a una de las inteligencias del modelo propuesto por Howard Gardner en la teoría de las inteligencias múltiples.



Se denomina Inteligencia Musical a la Facilidad que tiene una persona para identificar diversos sonidos y percibir sus elementos (intensidad, dirección, tono, timbre y frecuencia), así como el poder distinguir un sonido entre otros a la vez.





CARACTERÍSTICAS


  • Es la capacidad de expresarse mediante formas musicales.Es uno de los componentes del modelo de las inteligencias múltiples propuesto por Howard Gardner. Este modelo propugna que no existe una única inteligencia, sino una multiplicidad: en principio se propuso siete, que luego aumentó a ocho.

  • La capacidad musical incluye habilidades en el canto dentro de cualquier tecnicismo y género musical, tocar un instrumento a la perfección y lograr con él una adecuada presentación, dirigir un conjunto, ensamble, orquesta; componer (en cualquier modo y género), y en cierto grado, la apreciación musical. Sería, por tanto, no sólo la capacidad de componer e interpretar piezas con tono, ritmo y timbre en un, sino también de escuchar y de juzgar. Puede estar relacionada con la inteligencia lingüística, con la inteligencia espacial y con la inteligencia corporal cinética.

  • La inteligencia musical también se hace evidente en el desarrollo lingüístico, por cuanto demanda del individuo procesos mentales que involucran la categorización de referencias auditivas y su posterior asociación con preconceptos; esto es, el desarrollo de una habilidad para retener estructuras lingüísticas y asimilarlas en sus realizaciones fonéticas.




ÁREAS DEL CEREBRO QUE FUNCIONAN CON LA 

INTELIGENCIA MUSICAL


Ciertas áreas del cerebro desempeñan papeles importantes en la percepción y la producción musical. Estas, situadas por lo general en el hemisferio derecho, no están localizadas con claridad como sucede con el lenguaje. Sin embargo, pese la fatal de susceptibilidad concreta respecto a la habilidad musical en caso de lesiones cerebrales, existe evidencia de "música" (pérdida de habilidad musical).




Habilidades que Desarrolla la Inteligencia Musical





Las personas que desarrollan su Inteligencia Musical logran una alta capacidad de Atención y Concentración, son capaces de identificar un sonido o pieza musical desde sus primeras notas y reproducirlas respetando sus cualidades sonoras sin dificultad, también es capaz de conceptualizar el sentido de una melodía así como combinar sus elementos, de forma concreta o imaginaria, creando nuevas formas musicales.








Estrategias para Estimular la Inteligencia Musical


Es importante que se brinde una adecuada estimulación a los niños desde temprana edad para lograr desarrollar su Inteligencia musical, para ello se sugiere llevar a cabo las siguientes acciones:
  • Proporcionar un ambiente musical desde la gestación.
  • Realizar juegos musicales.
  • Cantar.
  • Facilitar elementos musicales en su entorno.
  • Proporcionar experiencias directas con la música.



Recomendaciones para Desarrollar la Inteligencia 

Musical en los Niños


















0 a 8 meses :
  • Cantar al bebé en voz baja y suave.
  • Al decir instrucciones darles entonación.
  • Escuchar CD?s de música instrumentada.
     8 a 1 año :
  • Atribuir un sonido a cada cosa.
  • Inventar sonidos.

1 a 3 años :
  • Asociar sonidos con las cosas.
  • En un lugar abierto, escuchar un mismo sonido en el día y luego por la noche.
  • Imitar voces jugando con títeres.
  • Identificar sonidos del ambiente.
3 a 5 años :
  • Grabar frases del niño de bebé y a esta edad, compararlas y descubrir las diferencias.
  • Vivenciar el silencio quitándole el sonido al televisor por unos minutos.
  • Escuchar diversos tipos de música.
5 a 6 años :


  • Reconocer canciones grabadas.
    Reconocer canciones de películas (decir el nombre de la película).

Existe una inteligencia musical


Considerando el elenco de las inteligencias, la más fácilmente identificable, pero también la más "etiquetada" es la musical. Prácticamente en todas las culturas se sabe que niños "conectan" o "tienen buen oído" para el canto o para la música y, por exclusión, cuáles muestran un notable fracaso en sus intentos. Aunque, en general, esa competencia no se considere como una inteligencia, frecuentemente se considera un talento.
Existen, no obstante, diferencias significativas entre lo que se conoce sobre la inteligencia musical y la idea que uno se hace de un "talento". En primer lugar, es importante caer en la cuenta de que el talento es, por definición, una capacidad excluyente. Jamás se muestra que todas las personas valgan para todo y así las que poseen algún talento se destacan de las demás. Dicho esto, la idea que uno se hace del talento es que se manifiesta "pronto" en las personas y que, cuando surge, casi siempre necesita perfeccionamiento. La idea que se tiene sobre la inteligencia es muy diferente. Todas las inteligencias existen en casi todas las personas, y pocas que no las poseen son claramente identificables por sus problemas de autismo o deficiencia neurológica congénita. Es posible distinguir que, en algunas personas, este o aquel espectro de una o más de sus inteligencias puede estar más acentuado o más limitado, pero, en todas las personas, todas las inteligencias se presentan preparadas para ser estimulas al máximo la apertura de su ventana mediante el uso de procedimiento adecuados. 

En Japón, es común que el niño desarrolle como componente fundamental de su educación infantil la alfabetización musical, no sólo para despertarle a una nueva dimensión de su interacción con el mundo, sino principalmente para hacerle capaz de expresar sus sentimientos y su conocimiento a través, también, del sonido.
El lado derecho del cerebro, donde, se sitúa el centro de la inteligencia musical, pasó a ser estimulado, y la competencia musical vivió momentos de exaltación. Por desgracia, ese interés no llegó con la misma intensidad a la América denominada civilizada, y la música no se puso de moda por la discutible fuerza de su presencia entre los nativos. Cuando Gardner afirma que el "interés musical rara vez cruzó el Atlántico", probablemente se refiere al Atlántico Norte. Los esclavos traídos a Brasil, incluso separados por culturas diferentes, siempre mostraron una fértil musicalidad que se manifestaba, unas veces, para expresar la dolorosa nostalgia y el vacío insuperable, y otras para expresar la euforia en sus escasos momentos de alegría. 
Tal como sucede con otras formas de inteligencia, también la musical puede identificarse. Estudios efectuados con personas que sufrieron lesiones cerebrales por un traumatismo o incluso por un derrame, muestran que muchas pueden tener una notable pérdida de alguna inteligencia, sobre todo la linguística y la cinestésica corporal, sin prejuicio alguno en su dominio e incluso en su memoria musical, y que pueden quedar músicalmente incapacitadas aunque conserven otras formas de inteligencia. En ese mismo sentido, en casi todas las culturas, son identificables los casos de gran competencia musical en personas con notables limitaciones motrices, verbales o interpersonales.
El estímulo de la musicalidad puede y debe fomentarse desde la más tierna infancia. Cuando los bebés balbucean, muchas veces están produciendo patrones musicales que repiten los cantos que escuchan en su entorno, transmitidos por las madres o por el disco que acompaña su sueño.

Ludwig van Beethoven




Considerado el último gran representante del clasicismo vienés (después de Christoph Willibald GluckJoseph Haydn y Wolfgang Amadeus Mozart), Beethoven consiguió hacer trascender la música del romanticismo, influyendo en diversidad de obras musicales del siglo XIX. Su arte se expresó en numerosos géneros y aunque las sinfonías fueron la fuente principal de su popularidad internacional, su impacto resultó ser principalmente significativo en sus obras para piano y música de cámara.
Su producción incluye los géneros pianísticos (treinta y dos sonatas para piano), de cámara (dieciséis cuartetos de cuerda, siete tríos, diez sonatas para violín y piano), vocal (lieder, dos misas y una óperaFidelio), concertante (cinco conciertos para piano y orquesta, uno para violín y orquesta) y orquestal (nueve sinfoníasoberturas, etc.), entre las que se encuentra el ciclo de las Nueve Sinfonías, incluyendo la Tercera Sinfonía, también llamada en castellano Heroica, en mi mayor, la Quinta Sinfonía, en do menor y la Novena Sinfonía, en re menor (cuyo cuarto movimiento está basado en la Oda a la Alegría, escrita por Friedrich von Schiller en 1785).

La vida personal de Beethoven fue problemática debido a su creciente sordera, que le llevó a plantearse el suicidio, según afirmó en los documentos encontrados en el Testamento de Heiligenstadt. A menudo, Beethoven era irascible y puede que sufriera trastorno bipolar. Sin embargo, tuvo un círculo íntimo de amigos fieles durante toda su vida, quizás atraídos por la fortaleza de su reputada personalidad. Hacia el final de su vida, los amigos de Beethoven compitieron en sus esfuerzos para ayudar al compositor a paliar sus incapacidades físicas.
Hay numerosas evidencias del desdén que sentía Beethoven hacia la autoridad y el sistema de clases sociales. Detenía su interpretación al piano si su audiencia comenzaba a hablar entre sí o si dejaban de prestarle total atención. En los eventos sociales, se negaba a interpretar si le invitaban a hacerlo sin previo aviso. Finalmente, y después de muchas confrontaciones, el archiduque Rudolf decretó unas normas básicas de etiqueta en la corte que no afectaban a Beethoven.

Wolfgang Amadeus Mozart


La obra mozartiana abarca todos los géneros musicales de su época y alcanza más de seiscientas creaciones, en su mayoría reconocidas como obras maestras de la música sinfónicaconcertantede cámara, para pianooperística y coral, logrando una popularidad y difusión universales.
En su niñez más temprana en Salzburgo, Mozart mostró una capacidad prodigiosa en el dominio de instrumentos de teclado y delviolín. Con tan solo cinco años ya componía obras musicales y sus interpretaciones eran del aprecio de la aristocracia y realeza europea. A los diecisiete años fue contratado como músico en la corte de Salzburgo, pero su inquietud le llevó a viajar en busca de una mejor posición, siempre componiendo de forma prolífica. Durante su visita a Viena en 1781, tras ser despedido de su puesto en la corte, decidió instalarse en esta ciudad donde alcanzó la fama que mantuvo el resto de su vida, a pesar de pasar por situaciones financieras difíciles. En sus años finales, compuso muchas de sus sinfonías, conciertos y óperas más conocidas, así como su Réquiem. Las circunstancias de su temprana muerte han sido objeto de numerosas especulaciones y elevadas a la categoría de mito.
En palabras de críticos de música como Nicholas Till, Mozart siempre aprendía vorazmente de otros músicos y desarrolló un esplendor y una madurez de estilo que abarcó desde la luz y la elegancia, a la oscuridad y la pasión —todo bien fundado por una visión de la humanidad «redimida por el arte, perdonada y reconciliada con la naturaleza y lo absoluto»—. Su influencia en toda la música occidental posterior es profunda; Ludwig van Beethoven escribió sus primeras composiciones a la sombra de Mozart, de quien Joseph Haydn escribió que «la posteridad no verá tal talento otra vez en cien años».